¿Crees que eres de los que tienes el control de tu vida? Si es así ¡Enhorabuena!
¿Decides tu presente y futuro? ¡Fenomenal!
¿O te dejas llevar por la corriente? Y nunca estás satisfecho.
Si el día a día, las circunstancias te impiden tomar el control de tu vida quizá sea porque nunca te has parado a pensar que solo tienes una oportunidad en la vida de vivirla intensamente. Ahora bien, si te decides a vivirla por ti mismo puede que no sepas por donde empezar.
Si crees que no vives como te gustaría, considera si te identificas con alguno de estos motivos que dificultan estar marcando el rumbo hacia tu meta y tener el control de tu vida.
No tienes un criterio propio. Eres de los que te dejas llevar por la corriente, y no tienes un criterio propio claramente definido sobre los asuntos de tu vida. Tendrás que preguntarte. ¿Cuáles son tus auténticas convicciones? Has de ser capaz de tener un criterio propio, sino corres el riesgo de comenzar a vivir la clase de vida que le gusta a otros y no la que a ti te gustaría.
Necesitas la aprobación y el permiso de los demás. Estas siempre buscando la aprobación de los demás. Ello te impedirá tomar tus decisiones, marcar tu meta y dirección a seguir. Empieza a creer en ti mismo sin la necesidad de que otros tengan que darte el visto bueno. Si a ti te importa, toma acción y hazlo realidad.
No tienes un plan claro para tu vida. ¿Y a qué esperas? Ya que si no tienes un plan para ti mismo, vas a ser parte del plan de otro.
No valorarte lo suficiente a ti mismo. ¿Realmente te valoras y aprecias lo que eres? Cuando empiezas a criticarte, juzgarte o valorarte de manera negativa, es bien fácil comenzar a perder el control del rumbo de la propia vida. Si no estás contento con tus resultados, comienza a tomar medidas, pero nunca lo achaques a tu falta de valía. Simplemente vas a tener que mejorar y cambiar algunas cosas.
Tener la sensación de que los demás no te escuchan. Si tienes la sensación de que a pesar de saber que tienes algo importante que comunicar, pareces invisible ante los demás. Entonces aprende a comunicarte de manera más efectiva. Descubre como crear una gran impresión,
Tienes miedo a ir tras tus sueños y objetivos. Cuando la falta de valentía te impide ir tras tus sueños y objetivos, y vas dejando que el miedo a las dificultades que se te presentarán en el camino, o tu propia inseguridad terminen paralizándote. Hay que asumir que los sueños solo se alcanzan a través de la acción. El miedo a tomar acción y los sueños son incompatibles.
No tienes pasión. El deseo, la pasión, el compromiso y la persistencia son cualidades esenciales para alcanzar cualquier clase de resultados que desees para tu vida. Si estos ingredientes faltan lo más probable es que simplemente te estés dejando llevar por la vida en lugar de estar creando la vida que realmente deseas.
¿Por qué no empiezas a poner más pasión en todo lo que haces en tu vida?
¿Y por qué no añadir un poco de deseo ardiente por alcanzar tus objetivos?
¿Y por qué no comprometerte firmemente con tus sueños y propósito de vida?
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