Miércoles 4 de septiembre, y habiendo vuelto del periodo de descanso. Te encuentras con fuerza, con ilusión, con motivación… ha valido la pena parar y descansar unos días. Tenías claro cual era tu propósito de vida, y lo has reafirmado. Este propósito  despierta tu pasión y traza tu misión tanto a nivel personal como profesional. Pues a continuar persiguiendo la meta fijada…

¿Cómo que no? Has vuelto con más confusión.

Antes del periodo estival no sabías cual era tu propósito de vida, y ahora tampoco. Quieres ser tu mism@ y la confusión te ofusca, sabes que necesitas de un cambio de vida  pero no sabes por dónde empezar.

El hombre, al menos una vez en la vida, debe perderse en un erial y experimentar una soledad absoluta, sana, un poco aburrida incluso. Y así descubrirá que depende completamente de sí mismo y conocerá sus capacidades potenciales.” Lonesome Traveler, Kerouak

Que te parece empezar con hacerte unas preguntas sobre ti y tu vida, y a partir de ahí iniciar ese cambio, esa transformación que te hagan sentir la satisfacción y la felicidad.

Rebuscando para encontrar un buen propósito de vida:

  • Estilo de vida. ¿Qué tiene de agradable y especial tu modo de vida? ¿Cambiarias algo? Anótalo.
  • Valores. ¿Qué es importante para ti? ¿Qué prioridades tienes? ¿Qué une tus valores?

Nota: por valores no me refiero solamente  a valores éticos, sino aquellos motores que activan y te mueven por la vida, ej. valores económicos, vitales, intelectuales, estéticos,… Anótalos.

  • Conocimientos. ¿Qué saberes has acumulado, habilidades, experiencias? ¿De qué fuentes obtienes tu información?
  • Influencia. ¿Quién o qué influencia tu comportamiento? ¿De dónde se nutren tus sueños? ¿Qué influencias tienes buenas o malas?
  • Motivación y deseo. ¿Qué necesitas o deseas? ¿Qué falta en tu vida? ¿Qué te hace levantarte por las mañanas? ¿Qué hace incrementar tu rabia? ¿Qué hace incrementar tu frustración?
  • Respeto. ¿Te respetas a ti mismo? ¿Te respetan los otros? ¿A quién respetas? ¿Qué puedes hacer para recuperar esos respetos?

 

La mejor señal de que no estás satisfecho con tu vida, o que vives superficialmente, se presenta cuando paras, por ejemplo durante el periodo de vacaciones, y entonces la angustia y la insatisfacción vienen a recordarte que para vivir en plenitud, satisfacción y felicidad es imprescindible contar con un propósito de vida.

No llenes ese vacío, no huyas de la soledad enmascarando tu realidad, hay algunos que empiezan con los coleccionables…

tú descubre cual es tu propósito de vida, averigua tu objetivo supremo y a por ello.