Los dinosaurios también tenían miedo.

¿Cómo superar esos miedos que te bloquean?

¿Cómo superar esos temores que te impiden ser tu mismo?

Y lo más importante:

¿Cómo superar esos miedos que impiden expresarte como eres?

 Tener miedo no es algo tan y tan malo, forma parte de tu ser, es un modo de enfrentarte a los peligros y amenazas que se presentan durante el transcurso de la vida.

El problema viene de cuando ese miedo se activa ante un estímulo muy débil (poca probabilidad que se presente el peligro o la amenaza) o cuando tú creas ese estimulo en tu mente, en tu imaginación, y no tiene una correspondencia con la realidad.

Y después está el miedo al que dirán, lo que pensaran los otros de ti. Lo que conoces como timidez, o vergüenza, eso no es miedo, eso es baja autoestima. Cambia la percepción que tienes sobre ti, no te castigues sin perdón.

Ya que permitir que los miedos te bloqueen, te intoxiquen, es  permitir que te impidan seguir y alcanzar tus sueños.

 Pequeños cambios que te pueden ayudar a superar tus miedos:

  1. Cambio. Admitir que tienes miedos.  El primer paso a la solución es reconocer el problema.
  2. Cambio. Apunta los miedos. En un trozo de papel, la exteriorización siempre permite ver el miedo desde una distancia que hace que pierda importancia, puedes extirparlo.
  3. Cambio. Investiga el miedo. Averigua el origen, la causa que ha provocado esa intoxicación. Conociendo el ¿Por qué? puedes buscar la solución.
  4. Cambio. Quita el poder al miedo, existe pero no te tiene porque controlar
  5. Cambio. ¡Ja! y ¿Cómo hago el cambio anterior? Enfrentándote cara a cara, experimenta aquello que te produce el miedo, verás como no es para tanto.
  6. Cambio. ¿Qué pierdes si no te enfrentas? Mucho, el no vivir intensamente
  7. Cambio. Y si no te ves con la valentía y determinación suficiente para realizar estos pequeños cambios, déjate acompañar por un agente provocador del cambio.

Y el miedo a ‘¿qué pensaran de mí? ¿Estaré a la altura?’

  • Y otro Cambio. Empieza a expresarte desde tu interior, con frescura y espontaneidad, no le des tanta importancia a lo que no la tiene:

 

 

 Suelta tus miedos, desintoxícate y déjate llevar

¡Vive la vida!